Las inversiones que realizan las afores en instrumentos que fomentan el desarrollo del país, al igual que el resto de las inversiones, generan rendimientos (intereses) que se capitalizan en nuestras cuentas individuales, haciéndolas crecer para que al momento de nuestro retiro tengamos mayores recursos. Las afores cobran comisiones sobre el saldo de la cuenta, a mayor saldo mayor es su comisión, por lo que están incentivadas en la generación de rendimientos. La institución encargada de regular tanto las inversiones como los cobros por parte de las afores es la Consar. Sin embargo, cada trabajador es libre de elegir la Afore que considere que más le conviene en cuanto a generación de rendimientos y responsable de revisar los movimientos de su cuenta individual. ¿Es mejor ahorrar en la afore que en fondos de inversión de bajo riesgo? El ahorro en la cuenta individual de las afores es obligatorio, tanto para el empleado como para el patrón. Adicionalmente, se pueden hacer aportaciones voluntarias, pero la decisión debe de ser del empleado en función de sus necesidades, ya que el ahorro en la afore se utilizará exclusivamente para el retiro. La inversión en instrumentos financieros va en función de las necesidades (liquidez) y perfil de riesgo de cada persona. Asimismo, existen diversos instrumentos y fondos de inversión (plazo, rendimiento, riesgo, etc.) que generan diferentes niveles de rendimiento, por lo que se tendría que analizar cada uno en particular.